viernes, 5 de junio de 2009

La velada


Miradas cálidas y sonrisas nerviosas. Manos entrelazadas y suspiros silenciosos. Palabras quedas y sonidos únicos. Luz de las velas y vino tinto. Alegría, tristeza y amor. En el mismo lugar, momento, sensación.

Noto tu mano acariciando la mía. Y cómo con la otra viertes más vino en mi copa vacía. Miro el líquido, que resplandece por el tenue color de las velas.

Levanto la mirada y tienes una sonrisa en la cara, y mis mejillas se encienden. Siempre has tenido la facilidad de hacerme sentir nerviosa con solo una mirada. Un suspiro silencioso sale de mi boca y se desliza por mi escote y hace que mi corazón se acelere.

Nerviosa, cojo la copa y la levanto, tu copa se acerca a la mía y se oye el suave tintineo de los cristales al chocar. "Por una buena velada"

Acerco la copa a mis labios y bebo lentamente. "Sí, una buena velada"




Yo preparo la cena, ¿quién me acerca el romanticismo?

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